Salgo de la ducha y me siento en el escritorio. En una ventana de mi monitor el Perro dice: hola.
En mi pecho una sensación de expansión que de alguna manera me hace hervir el vientre. Algo comienza a crecer en el campo arrasado, esto es: el comienzo de la vida.
Crecen mis dientes.
Yo quiero salir a la caza del búfalo.
Desnuda, me inclino sobre el monitor.
Muerdo mi labio inferior mientras me cuenta una historia extraña sobre ascensores que sé que voy a interrumpir porque nada es más interesante que la cacería.
Lentamente tipeo: “Anoche yo quería comerte la boca a besos, pero me acabo de separar y estoy jodida”.
Escribe.
Borra.
Escribe.
Borra.
Sonrío.
Escribo: No puedo besarte hasta que entiendas que algún día voy a volver con Wen y voy a casarme con él porque ese es mi destino.
-Siempre te decís las mismas mentiras, Pola-
Dice: No soy de los que se casan.
Digo: Lo sé, pero yo soy una princesa, las princesas nos casamos.
Dice: Besame a mi, casate con quien quieras.
Así como así, cede el control.
Un pacto con la bestia.
Una sensación cálida en el vientre.
El viernes voy a ir a su casa a besarlo.
Comienzo a pasar crema por mis piernas, ya puede contarme todo acerca de los ascensores.
Dive straight into the feedback!Login below and you can start commenting using your own user instantly